15/11/2014 Clarín - Nota - El País - Pag. 6
Congreso Proyectos polémicos
La maratón de leyes de fin de año desató una dura interna K
Fertilización, yerba mate y universidad militar provocaron cruces en Diputados. En el Senado pidieron retocar textos.
Marcelo Helfgot
mhelfgot@clarin.com
El clima de fin de ciclo que se palpita en los despachos opositores empezó a respirarse en los de sus colegas oficialistas. No hay otro modo de interpretar los inéditos brotes de rebeldía que estallaron esta semana en reuniones de diputados y senadores del Frente para la Victoria, acostumbrados en los últimos años al disciplinamiento automático.
Con la maratón de leyes de fin de año como telón de fondo y en visperas de la largada de la carrera por la sucesión de Cristina, los senadores comandados por Miguel Pichetto se plantaron frente a algunas de las cláusulas más polémicas del nuevo Código Procesal Penal y del proyecto de ley de telecomunciaciones (ver pág. 8), al punto de conseguir que el Gobierno accediera a hacer retoques que venía resistiendo.
De todos modos, los mayores chispazos saltaron en el encuentro del oficialismo en la Cámara Baja, el martes. Comenzó como un rutinario repaso del listado de proyectos a debatir al día siguiente, en buena parte consensuados con la oposición, y derivó en una catarata de cruces sobre temas que habían logrado dictamen de comisión sin haber sido digeridos convenientemente.
Así, las diferencias sobre la ley de fertilización asistida enfrentó a progresistas y conservadores; la de envase en origen de la yerba mate a misioneros y correntinos con santafesinos y cordobeses; y la creación de la Universidad de la Defensa Nacional a dos ex compañeras de ruta de la Alianza reconvertidas en abanderadas de la gestión K, Adriana Puiggrós y Diana Conti.
El efecto de tanto ruido interno volvió a poner en cuestionamiento el manejo de bloque por parte de Juliana Di Tullio, y dio letra a la legión del interior que nunca dejó de quejarse por lo bajo por el poder que concentran los bonaerenses, al tener también al presidente de la Cámara, Julián Domínguez.
Las discusiones oscilaron entre argumentos de fondo y veladas peleas personales, según revelaron a Clarín fuentes de la bancada, que dieron como cierto que el más castigado de la reunión fue el cordobés Martín Gill. La conducción de la tropa K le recriminó su cruzada contraria al proyecto de fertilización. Cercano al Opus Dei, el ex rector de la Universidad de Villa María había comprometido a unos 25 miembros del bloque a rechazar una ley que el oficialismo decidió apurar para balancear la claúsula sobre "el inicio de la vida desde la concepción" que incluyó en el Código Civil por presión de la Iglesia.
Después de la reprimenda, fueron siete los que se animaron a votar contra el artículo que permite descartar embriones (alegando que es abortivo), en tanto que Gill optó por abstenerse y otros diez se ausentaron, entre ellos Martín Insaurralde, aún diputado K.
La disidencia de Puiggrós fue acompañada por el socalista K Jorge Rivas y tuvo silenciosos acompañantes: los 17 diputados propios que quedaron fuera de la votación, alegando que se habían ido a cenar.
El kirchnerismo pudo darle media sanción a la Universidad militar, que dispondrá de cientos de cargos para repartir entre militantes K y del cuestionado general César Milani como parte de su consejo académico, con ayuda opositora.
Si se hubiera retirado en masa, la sesión caía por falta de quórum.
El oficialismo esquivó el fracaso, pero no pudo evitar que salieran a luz sus cicatrices. Puiggrós hizo el cuestionamiento más lapidarios y fundamentados a la ley, preguntándose como se compatibiliza la verticalidad obligada de las Fuerzas Armadas con la autonomía que la ley le otorga a las universidades.
Conti hizo gala de su fanatismo cristinista y vinculó a la eximia pedagoga nada menos que con Elisa Carrió, quien equiparó a Milani con el represor Emilio Massera. La ley de la yerba mate (o "antipeperina", como la bautizó el humor cordobés) derivó en retoques acordados (ver aparte) tras un duelo verbal entre el santafesino Omar Perotti y el misionero Alex Ziegler
Duelo de diputadas kirchneristas Es inaceptable que se ponga en juego la verticalidad en la educación de las fuerzas armadas".
Adriana Puiggrós
"Alguna diputada de nuestro bloque extraña haber estado con Lilita Carrió y quiera volver a estar con ella".
Diana Conti
Congreso Proyectos polémicos
La maratón de leyes de fin de año desató una dura interna K
Fertilización, yerba mate y universidad militar provocaron cruces en Diputados. En el Senado pidieron retocar textos.
Marcelo Helfgot
mhelfgot@clarin.com
El clima de fin de ciclo que se palpita en los despachos opositores empezó a respirarse en los de sus colegas oficialistas. No hay otro modo de interpretar los inéditos brotes de rebeldía que estallaron esta semana en reuniones de diputados y senadores del Frente para la Victoria, acostumbrados en los últimos años al disciplinamiento automático.
Con la maratón de leyes de fin de año como telón de fondo y en visperas de la largada de la carrera por la sucesión de Cristina, los senadores comandados por Miguel Pichetto se plantaron frente a algunas de las cláusulas más polémicas del nuevo Código Procesal Penal y del proyecto de ley de telecomunciaciones (ver pág. 8), al punto de conseguir que el Gobierno accediera a hacer retoques que venía resistiendo.
De todos modos, los mayores chispazos saltaron en el encuentro del oficialismo en la Cámara Baja, el martes. Comenzó como un rutinario repaso del listado de proyectos a debatir al día siguiente, en buena parte consensuados con la oposición, y derivó en una catarata de cruces sobre temas que habían logrado dictamen de comisión sin haber sido digeridos convenientemente.
Así, las diferencias sobre la ley de fertilización asistida enfrentó a progresistas y conservadores; la de envase en origen de la yerba mate a misioneros y correntinos con santafesinos y cordobeses; y la creación de la Universidad de la Defensa Nacional a dos ex compañeras de ruta de la Alianza reconvertidas en abanderadas de la gestión K, Adriana Puiggrós y Diana Conti.
El efecto de tanto ruido interno volvió a poner en cuestionamiento el manejo de bloque por parte de Juliana Di Tullio, y dio letra a la legión del interior que nunca dejó de quejarse por lo bajo por el poder que concentran los bonaerenses, al tener también al presidente de la Cámara, Julián Domínguez.
Las discusiones oscilaron entre argumentos de fondo y veladas peleas personales, según revelaron a Clarín fuentes de la bancada, que dieron como cierto que el más castigado de la reunión fue el cordobés Martín Gill. La conducción de la tropa K le recriminó su cruzada contraria al proyecto de fertilización. Cercano al Opus Dei, el ex rector de la Universidad de Villa María había comprometido a unos 25 miembros del bloque a rechazar una ley que el oficialismo decidió apurar para balancear la claúsula sobre "el inicio de la vida desde la concepción" que incluyó en el Código Civil por presión de la Iglesia.
Después de la reprimenda, fueron siete los que se animaron a votar contra el artículo que permite descartar embriones (alegando que es abortivo), en tanto que Gill optó por abstenerse y otros diez se ausentaron, entre ellos Martín Insaurralde, aún diputado K.
La disidencia de Puiggrós fue acompañada por el socalista K Jorge Rivas y tuvo silenciosos acompañantes: los 17 diputados propios que quedaron fuera de la votación, alegando que se habían ido a cenar.
El kirchnerismo pudo darle media sanción a la Universidad militar, que dispondrá de cientos de cargos para repartir entre militantes K y del cuestionado general César Milani como parte de su consejo académico, con ayuda opositora.
Si se hubiera retirado en masa, la sesión caía por falta de quórum.
El oficialismo esquivó el fracaso, pero no pudo evitar que salieran a luz sus cicatrices. Puiggrós hizo el cuestionamiento más lapidarios y fundamentados a la ley, preguntándose como se compatibiliza la verticalidad obligada de las Fuerzas Armadas con la autonomía que la ley le otorga a las universidades.
Conti hizo gala de su fanatismo cristinista y vinculó a la eximia pedagoga nada menos que con Elisa Carrió, quien equiparó a Milani con el represor Emilio Massera. La ley de la yerba mate (o "antipeperina", como la bautizó el humor cordobés) derivó en retoques acordados (ver aparte) tras un duelo verbal entre el santafesino Omar Perotti y el misionero Alex Ziegler
Duelo de diputadas kirchneristas Es inaceptable que se ponga en juego la verticalidad en la educación de las fuerzas armadas".
Adriana Puiggrós
"Alguna diputada de nuestro bloque extraña haber estado con Lilita Carrió y quiera volver a estar con ella".
Diana Conti
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