jueves, 4 de septiembre de 2008

4 de septiembre de 2008

BAE - Nota - Política - Pag. 11
EL PS PROVINCIAL ALERTÓ SOBRE UNA POSIBLE INTERVENCIÓN PARA EXPULSAR A LOS “SOCIALISTAS K”
Las aguas del Partido Socialista, cada vez más divididas


El impacto que tuvo en los partidos tradicionales la propuesta de la Concertación Plural –que captó la atención de radicales y peronistas, entre otros– ahora estaría repercutiendo en el Partido Socialista.
El núcleo duro de esta estructura tradicional comenzó a sacar a la luz su “incomodidad” con la participación de varios de sus dirigentes en el proyecto del Gobierno nacional.
Por eso, con la supuesta intención de agrupar las posturas dentro del partido, la conducción nacional del socialismo realizará el próximo sábado un congreso extraordinario para tratar, por un lado, la “modificación de la carta orgánica partidaria” y por el otro, la “situación de la provincia de Buenos Aires”.
No obstante, de acuerdo con fuentes allegadas al Partido Socialista provincial, esta convocatoria traería bajo el brazo un par de expulsiones que estarían implícitas en la generalización de sus propuestas.
En este sentido, las mismas fuentes aseguraron que para modificar la carta orgánica lo primero que habría que hacer es decidir “cuáles son los puntos que se pretenden cambiar, porque se convocó a los congresales del partido sin decirles nada”.
Al mismo tiempo, manifestaron sospechas sobre la intención de esta convocatoria ya que podrían incluir “la intervención partidaria en la Carta Magna del PS”, lo que “implicaría la expulsión de socialistas K” que ingresaron en el Gobierno nacional con el Partido de la Victoria y otras fuerzas afines en el marco de la Concertación Plural.
“Sin razón y sin fundamento la comisión convocó un congreso para tratar dos temas que no se explican y así los que asistan no van a recibir información sobre lo que se va a discutir de fondo”, manifestaron.
Asimismo, alertaron que algunos dirigentes estarían buscando “sustituir autoridades legislativas que fueron elegidas por los afiliados al PS por gente que elijan ellos”.
En ese sentido, advirtieron que los dirigentes del PS nacional –encabezado por el senador nacional por la provincia de Santa Fe Rubén Giustiniani– harían “votar a ciegas a los congresales, que no saben qué es lo que van a votar porque la Carta Magna tiene centenares de artículos”.
Actualmente, el partido socialista se encuentra dividido entre los socialistas K y aquellos que se aliaron con la Coalición Cívica de Elisa Carrió, con el PRO de Mauricio Macri o con la Sociedad Rural.
No obstante, el grupo de Ariel Basteiro y de Oscar González, el principal funcionario socialista actual en la gestión de la presidenta Cristina Fernández, tiene planeado resistir los ataques, por lo que ya ratificó la convocatoria para las elecciones de renovación de su junta ejecutiva y candidatos a cargos electivos para el 2009.
“La propia Justicia ya aprobó la decisión del Partido Socialista de la provincia de renovar autoridades el 30 de noviembre y elegir candidatos para el 2009 y no hay nada más regular que eso”, aseguró González al ser consultado sobre la situación interna de su partido.
Aseguró que “ellos quieren que todo el partido se sume a la alianza que hicieron con la oposición” y aclaró que “nosotros no nos bajamos de la posición progresista ni nos vamos a unir a partidos de la derecha”.
MAYORÍA. El año pasado el Partido Socialista había aprobado con 236 votos a favor y sólo 4 abstenciones la “articulación política y electoral en la provincia de Buenos Aires con el Partido de la Victoria”.
Los congresales resolvieron avalar y respaldar la participación de Jorge Rivas y de Ariel Basteiro en la gestión del Ejecutivo nacional, y repudiar las presiones y las amenazas de cierta dirigencia que pretende limitar la expresión de diferencias políticas en el interior del partido.