sábado, 25 de julio de 2020

Jorge Rivas en Página/12 Sábado 25/07/2020 》

República pandémica
Debilitar a Alberto Fernández para condicionar la pospandemia
La oposición, minoritaria, trata de llevar el debate a un escenario de realidad virtual donde ellos valen lo mismo o más que la mayoría, según queda plasmado en el diseño de las corporaciones mediáticas.

Por Luis Bruschtein
25 de julio de 2020

Se habla de pospandemia y se desestima este tránsito intrapandemia porque se supone que es como antes de la pandemia. Pero la única relación de millones de personas con el mundo son las redes y los medios, entonces la ecuación de poder se asienta más en la propiedad de los medios que en una representación democrática. “Ustedes no pueden aceptar que son minoría” fue una frase que le soltó el jueves Cristina Kirchner en el Senado a la oposición. Además el margen de decisiones que puede tomar el Gobierno es como si estuviera dentro de un submarino porque no sabe a ciencia cierta cuánto se va a producir y cuánto se va a vender o se va a comprar y se maneja sin una expresión del respaldo, más que la que le transmiten los medios. No es tan extremo como la imagen que genera esa enumeración, pero sin duda esos factores alteran el ejercicio del gobierno y distorsionan el engranaje complejo de la democracia.

La expresión de los medios no es democrática, eso ya se sabe, porque responden a los intereses de sus propietarios. No es un poder republicano porque nadie lo elige ni lo controla, aunque se lo quiera introducir por abajo de la mesa como el quinto poder.

Las redes tienen un nivel de distorsión por los mismos motivos a veces, ya sea por el manejo de trolls y bots, pero también por la lógica con la que se publica. Hay un tuit que circuló mucho con la frase de Jorge Rivas que PáginaI12 publicó en el recuadro de tapa de ayer. El dirigente socialista afirma que sin importar el contexto en que haya ocurrido “la justicia por mano propia es inadmisible”. Y una persona le contestó: “Es fácil hablar sin haberlo vivido”.

El contraste entre los dos mensajes tiene una violencia inusitada que surge del malentendido o la ignorancia, del borbotón y del todo vale. Puede tener un transcurso normal y de repente el tono de las redes sube a esos niveles de violencia tóxica, a veces insoportable.

La discusión del escenario del 9 de Julio en la Quinta de Olivos adquirió ese tono. Hebe publicó una carta legítima con su crítica. Fue un gesto fuerte como ha sido siempre la forma de expresión de Hebe.

Pero detrás de la carta pública de Hebe hubo una catarata de mensajes que le agregaban otro sesgo: “hasta aquí llegué” o “para mí se terminó”, que no era el sentido de la crítica enérgica de Hebe, pero que crearon un clima a partir del cual los que se sentían identificados con esa crítica tenían que subirse al mismo plano de ruptura. El movimiento fue empujar esa crítica hacia una posición de ruptura.

Algo similar, pero de manera más abierta, se produjo con la posición del Gobierno ante Venezuela. En el Frente de Todos, los acuerdos sobre ese tema van desde el no intervencionismo hasta el reconocimiento de Nicolás Maduro como presidente constitucional y un alineamiento regional en ese sentido, por fuera del que impulsa Washington. Pero en el tema de los derechos humanos siempre hubo matices, incluso durante los gobiernos kirchneristas.

Esas diferencias, que bien valen un debate interno, fueron utilizadas por Clarín, La Nación e Infobae para sacarlas de contexto, anunciar con grandes titulares un cambio en la posición de Alberto Fernández y hasta hubo un comunicado del macrismo para felicitarlo por su nuevo posicionamiento. Otra vez se trataba de manipular las diferencias que existen dentro del frente que gobierna para llevarlas al plano de la ruptura.

Esto produjo un fuerte debate en las redes y en portales sobre el derecho a la crítica en el Frente de Todos. El que no critica vendría a ser un olfa ultraoficialista y el que critica, un torpedo macrista. Los planteos extremos entre posiciones que pueden resolverse en un debate más razonable surgen de la vulnerabilidad que genera esta situación de pandemia y aislamiento ante la prepotencia mediática para imponer su agenda y arrastrar ese debate a una situación de no retorno y ruptura.

Cuando se impide la crítica en una institución o agrupamiento, la presión que se genera es peor y puede provocar la explosión. La crítica es necesaria porque enriquece y equilibra. Y quedó claro que el Frente de Todos no tiene ámbitos donde se puedan volcar estas discusiones. Menos aún en esta situación de aislamiento. Pero también resultó claro que esa discusión tiene que evitar la agenda, los tiempos y el tono que le quiere imponer el adversario.

No es una tarea fácil. Las formas celulares tradicionales siempre han funcionado más para el control que para la discusión. Una organización de masas tiene que encontrar formas que habiliten ese debate sin convertirla en uniforme ni sectaria. La calle o la asamblea han sido el lugar de debate del peronismo, pero ahora no se puede.

La frase de Cristina Kirchner en el Senado tuvo la puntería de la síntesis porque en el marco de una sociedad sumida en el aislamiento y el temor a la pandemia, la oposición trata de llevar el debate a un escenario de realidad virtual donde ellos valen lo mismo o más que la mayoría, según queda plasmado en el diseño de las corporaciones mediáticas.

El macrismo gobernó con todo a su favor, desde el poder económico hasta las corporaciones de medios, y fue un desastre: ni siquiera pudo reelegir y perdió por nueve puntos de diferencia. Desde las elecciones hasta ahora ha perdido más base todavía. Son minoría real e indiscutible aunque el escenario mediático trate de equipararlos.

De todos modos, resulta claro que la perspectiva de quién y cómo pagará la salida de la pandemia ha sensibilizado a los sectores más cerrados del poder económico. El golpe que recibieron Mauricio Macri y María Eugenia Vidal en las elecciones pasadas dejó vacante el liderazgo de la oposición. Y las corporaciones mediáticas tienden a ocupar ese vacío con un discurso cada vez más violento en representación de los grupos económicos concentrados.

Con los antecedentes golpistas en Bolivia y Brasil, algunos ven intenciones similares en esta fuerte ofensiva en un momento tan crítico de la pandemia.

Está comprobado que el peritaje y el testimonio que se usaron para la detención preventiva de Roberto Baratta y Julio De Vido fueron truchos. La declaración estuvo a cargo de Marcelo D'Alessio, el falso abogado que operaba con la AFI macrista, y el peritaje lo hizo David Cohen, que está bajo la misma sospecha en un juicio por falso testimonio. Situaciones similares se plantean en la mayoría de las causas creadas por el lawfare macrista.

Las declaraciones de los espías de la AFI (ex SIDE) en el Congreso demuestran que Mauricio Macri puso la agencia de espionaje al servicio del lawfare, ya fuera para presionar testigos o jueces o para difundir intimidades de las víctimas a través de políticos y periodistas amigos. El objetivo no era alimentar a la Justicia con pruebas, sino usar a la Justicia para destruir al opositor.

No hay cuadernos invisibles ni cuentas de fantasía, ni testigos presionados. Son testimonios directos de los actores de los hechos, pruebas documentales concretas. Las pruebas son irrebatibles. Cualquier persona honesta tendría que reconocer que se equivocó al creer en las falsas acusaciones del lawfare.

Nadie refuta esas pruebas. Se limitan a decir que no son ciertas, pero ni siquiera aportan datos para desmentirlas. Los columnistas del macrismo se pusieron de acuerdo para juntar estas causas con la propuesta de reforma judicial. Afirman que unas y otra constituyen la vía para lograr impunidad para Cristina Kirchner, que sería el verdadero gobierno.

La idea del golpe parece lejana porque la derecha no tiene con quién reemplazar al Gobierno, está descabezada. Pero es claro el objetivo de debilitar a Alberto Fernández para condicionar la salida de la pandemia. Todo apunta a que será un momento importante de definiciones.

https://www.pagina12.com.ar/280745-debilitar-a-alberto-fernandez-para-condicionar-la-pospandemi




jueves, 23 de julio de 2020

Nada justifica que un hombre mate a otro que se encuentra indefenso. Éticamente es inadmisible. Partiendo de ese principio, puede haber causales agravantes o atenuantes.

Hay opiniones que no permiten ambigüedad según el humor social. Nada justifica que un hombre mate a otro que se encuentra indefenso. Éticamente es inadmisible. Partiendo de ese principio, puede haber causales agravantes o atenuantes. Pero como sociedad civilizada, debemos ser contundentes en rechazar la institucionalización de la venganza por mano propia.

domingo, 5 de julio de 2020

Simposio “INTERNACIONALISMO Y SOCIALISMOS” - 7, 8 y 9 de Julio de 2020, 17 hs. (vía Zoom)▪︎Socialistas de Argentina, Chile, Uruguay, MAS de Bolivia + CELAG + Y otros espacios políticos y sociales progresistas 》

Simposio "INTERNACIONALISMO Y SOCIALISMOS"

Encuentro Político Regional

7, 8 y 9 de Julio de 2020, 17 hs. –En estos días se realizará un importante simposio internacional, con modalidad virtual, titulado "Internacionalismo y Socialismo". El mismo se encuentra organizado por la Revista Socialista, la Fundación Casa del Pueblo, el observatorio social Madriguera de Ideas, la revista Sociedad Futura,  y el Instituto Igualdad (Chile). A lo largo de tres días expositores de diversos países de América Latina disertarán sobre las experiencias del campo socialista, de articulación internacional así como sobre las nuevas iniciativas regionales y globales. 

A partir del diálogo entre destacados dirigentes e intelectuales, la actividad se propone reflexionar sobre el presente y el futuro de un internacionalismo socialista. En un momento de feroz globalización la necesidad de articulaciones internacionales solidarias parecen volverse cada vez más necesarias.

El primero de los paneles será el martes 7 de Julio. Participarán Eduardo Di Pollina (diputado nacional y provincial M. C., y actual secretario de relaciones internacionales del Partido Socialista), Matías Capeluto (recientemente nombrado Director Ejecutivo en la Casa Patria Grande por el presidente Alberto Fernández) y Nadine Borges (Abogada y miembro de la Comisión de Verdad –Brasil).

Mientras que el segundo de los paneles será el miércoles 8 de Julio. Estarán en el Oscar González (diputado nacional M. C., ex Secretario de Relaciones Parlamentarias y dirigente del Socialismo para la Victoria), Gonzalo Civila (Secretario General del Partido Socialista de Uruguay y Diputado Nacional por el Frente Amplio) y María Julia Bertomeu (Doctora en Filosofía y miembro del comité de redacción de la revista digital SinPermiso).

El tercero y último de los paneles será el jueves 9 de Julio. Disertarán Guillermo Oglietti (Doctor en Filosofía y miembro del Consejo Directivo de CELAG), Patricia Arce (Alcaldesa de Vinto –Bolivia- por el MAS –Movimiento al Socialismo-) y Daniel Melo (Diputado Nacional M. C. por el Partido  Socialista Chileno).

La inscripción se puede realizar en www.sociedadfutura.com.ar y la transmisión será vía ZOOM, de forma totalmente gratuita. 
 
Sociedad Futura - Revista Socialista - Fundación Casa del Pueblo - Observatorio

Vía Zoom

Inscripción:

Miércoles 7 de Julio
Moderadora Lucía Abelleira (Revista Sociedad Futura)
Eduardo Di Pollina (Secretario de Relaciones Internacionales del Partido Socialista -Argentina- ) 
Matías Capeluto ( Director Ejecutivo Casa Patria Grande)
Nadine Borges (Abogada, miembro de la Comisión de Verdad –Brasil)

Jueves 8 de Julio
Moderador Fernando Toledo (Revista Socialista)
Oscar González (Fundación Casa del Pueblo -Argentina- ) 
Gonzalo Civila (Secc Gral. PS -Uruguay-, y Diputado por el Frente Amplio)
María Julia Bertomeu (Comité de redacción de la revista digital SinPermiso)

Viernes 9 de Julio
Moderador  Hernán Martini (Observatorio Social Madriguera de Ideas)
Guillermo Oglietti (Celag) 
Daniel Melo (Partido Socialista -Chile-)
Patricia Arce (Alcadesa de Vinto –Bolivia-)


El socialismo siempre tuvo una vocación internacionalista, por eso es importante revivirlo y repensarlo,  en el momento actual de feroz globalización económica que, al mismo tiempo, se muestra diariamente incapaz de aportar respuestas globales ante la crisis capitalista mundial, entre ellas la sanitaria. Iniciativas en este sentido no faltan, pues afortunadamente el campo progresista internacional está activo y dispuesto a pensar y enfrentar la crisis, proponiendo encuentros, campañas, constituyendo redes, prensa escrita y virtual, entre otras.
En su batalla en contra del capitalismo el socialismo no conoció fronteras; siempre estuvo atento a la internacionalización de sus luchas, a las que entendía como una especie de  "fraternidad entre los pueblos". Si el horizonte humano tenía un carácter universal, los límites territoriales de cada país no podían limitar la acción concertada para la construcción de un mundo distinto.
Las iniciativas de cooperación internacional son múltiples, abarcan cosas tales como la formación de asociaciones políticas, y la prensa escrita, hasta movimientos de lucha por los derechos humanos y la solidaridad. El recuerdo de esas luchas debería ser un para elaborar propuestas válidas también para el siglo XXI. 
Nos proponemos -y los invitamos- a reflexionar sobre la historia, el presente y el futuro de un internacionalismo socialista, a fin de iniciar diálogo entre diferentes tradiciones socialistas y conocer algunas experiencias de articulación internacional. Comenzamos invitando a dialogar a algunos dirigentes políticos e intelectuales, que tienen experiencia en la organización de algunas iniciativas socialistas, para dialogar sobre alternativas y propuestas para el campo internacional progresista.
 
Se extenderán certificados para asistentes emitidos por la Fundación Casa del Pueblo.

El evento es de carácter gratuito para todes.

Contacto para información:
Hernán Martini – 1144034804
Fernando Toledo - 1161088788