La oposición también fustigó la agresión
El hecho no sólo mereció el lógico repudio del oficialismo, sino que también la oposición salió a fustigar la agresión de los ruralistas hacia Agustín Rossi y su hermano Alejandro. Los diputados nacionales de la Coalición Cívica consideraron que "el escrache no es un método aceptable para que los ciudadanos ejerzan su legítimo derecho a la protesta". Y en boca de su titular, Adrián Pérez, hicieron un llamamiento "a todos los sectores políticos y sociales a mantener la paz y a transitar los conflictos emergentes de la actual crisis económica que vive el país en un marco de respeto y diálogo". En tanto, el bloque del Partido Socialista afirmó: "No hay ningún motivo válido para semejante hecho. No podemos convalidar bajo ninguna justificación este tipo de acciones". A su turno, el también socialista Oscar González, ligado al gobierno al ser el secretario de Relaciones Parlamentarias de la Jefatura de Gabinete, manifestó: "Los huevos y la bosta no fueron arrojados sólo por los integrantes de una pandilla salvaje; también los impulsó el discurso groseramente autoritario que gritaron públicamente durante el último año muchos dirigentes de las organizaciones del capital agrario y de algunas facciones políticas que los apoyaron en el conflicto por las retenciones". Por su parte, el macrista Federico Pinedo y el titular de la bancada del Frejuli, el peronista disidente Luis Lusquiños, también repudiaron la agresión al presentar un proyecto de declaración en Diputados que dice: "La Cámara de Diputados repudia los actos de violencia de que fueron víctimas los diputados nacionales Agustín y Alejandro Rossi, quienes fueron agredidos en un acto de intolerancia antidemocrática". (Pag. 3)
